Dos horas de luz, veintidós horas de oscuridad completa, una lata de caldo y una de excrementos, sed en verano, en invierno el diluvio; ésta era la vida en aquellas cárceles subterráneas.
Si el verbo " estar" se utiliza para hablar de estados de ánimo, el verbo " tener" se utiliza, por ejemplo, para hablar de sensaciones fisiológicas, por ejemplo, " tener sed" : cuando quiero beber agua.